martes, 10 de junio de 2014

UJA

LA UJA
Los orígenes de la Universidad de Jaén se remontan a la creación de la Universidad de Baeza en la Edad Moderna, con un amplio recorrido hasta llegar a 1993 en que inicia su andadura como institución autónoma. Desde entonces, la Universidad de Jaén ha sabido dar respuesta a las demandas de la comunidad académica, y de toda la sociedad en general.

La institución viene realizando una apuesta decidida por la innovación y la calidad, tanto en la impartición de sus titulaciones, como en el avance de sus infraestructuras que se traduce en el aumento de la actividad docente e investigadora.

La oferta académica de la Universidad de Jaén, diseñada de acuerdo con las necesidades laborales y profesionales de la sociedad, consta de más de 50 titulaciones de Grado, Primer y Segundo Ciclo y 22 másteres, algunos de ellos impartidos on-line. En los campus de Jaén y Linares se fomenta el estudio, el diálogo y la convivencia, por lo que los estudiantes de la UJA viven intensamente la etapa universitaria, al desarrollar su actividad diaria en un entorno ideal para las relaciones y el contacto interdisciplinar con otros alumnos y profesores.

Las clases, de un alto contenido práctico, están formadas por grupos reducidos, siguiendo las directrices del nuevo Espacio Europeo de Educación Superior (EEES). Los laboratorios de investigación están dotados con el material más moderno para que los estudiantes puedan desarrollar sus actividades prácticas con la tecnología más avanzada.

Ante las exigencias del EEES, la Universidad de Jaén ha incorporado nuevas medidas en el seno del Plan de Innovación Docente y Formación del Profesorado, tales como el fomento del multilingüismo, la creación de materiales docentes empleando las TIC, un plan de formación de formadores, acciones divulgativas dirigidas a orientadores y profesionales de Bachillerato y la convocatoria de movilidad en innovación docente, entre otros.

El capital humano de la UJA es uno de los pilares más sólidos de la institución. Más de 1000 profesionales forman parte del personal docente e investigador (PDI) y más de 400 se dedican a la administración y servicios, configurando un equipo unido que da cobertura a las necesidades de los 16000 alumnos matriculados en los distintos cursos de grado y postgrado que se imparten en la Universidad de Jaén.






MARTOS


MARTOS

  • Martos es una ciudad y municipio español de la provincia de Jaén, oficialmente pertenece a la comarca metropolitana de Jaén, aunque tradicionalmente se considera que forma parte de la comarca de la sierra Sur de Jaén. Lo que hace que sea el quinto municipio de la provincia por población, y el segundo más importante del área metropolitana de Jaén, después de la capital provincial, en población y actividad económica. Popularmente Martos es conocida como la Ciudad de la Peña, al estar situada a las faldas de un peñón conocido como la «Peña de Martos».
  • Los orígenes de la ciudad se remontan a la prehistoria, con el desarrollo de los primeros asentamientos humanos en torno a la imponente peña que domina la ciudad, por este motivo, y la orografía accidentada del terreno, hace que el casco histórico esté compuesto por calles angostas, sinuosas y empinadas, mientras que los nuevos barrios buscan la llanura propia del valle del Guadalquivir hacia el oeste y suroeste de la ciudad. El casco histórico de Martos está declarado Bien de Interés Cultural, con la categoría de conjunto histórico-artístico.
  • La actividad económica marteña se apoya en dos ejes productivos principales, el agrícola y el industrial, con gran presencia de este último en el municipio gracias a la instalación de fábricas afines a la automoción, y sus industrias auxiliares, motor de empleo y riqueza para el municipio y su comarca. Además de desarrollar actividades fabriles relacionadas con la agricultura, existen minas de diatomita y trípoli, que se extrae para usos industriales.

 Imagen de la Virgen de la Villa

martes, 3 de junio de 2014

CAZORLA

CAZORLA
 
Es el municipio más grande y cabecera de la Comarca Sierra de Cazorla. Se encuentra en las faldas de la Sierra de Cazorla, en el valle del río Cerezuelo, afluente del Guadalquivir.
En los siglos XVII y XVIII se originaron pleitos entre la Corona y la Mitra por cuestiones de jurisdicción, fueros y rentas que empobrecieron el Señorío. En 1811, las Cortes de Cádiz abolieron la jurisdicción civil de la Mitra Toledana sobre estas tierras, aunque no ocurriría lo mismo con la eclesiástica. Cazorla y las demás villas y aldeas del Adelantamiento seguirían dependientes del arzobispado de Toledo hasta 1954.
Durante la guerra de independencia, los vecinos de esta Comarca se distinguieron por su patriotismo, luchando heroicamente contra el invasor. Restos de la crudeza del momento, son las ruinas de la iglesia mayor de Santa María, que fue destruida y nunca se terminó por completo,por el invasor. Como premio a tan altos servicios, las Cortes Generales de Cádiz, concedieron, el día 1 de abril de 1813 a la Villa de Cazorla, el título de Ciudad, con la distinción de "Muy Noble y muy Leal". Más tarde Alfonso XII recompensó la fidelidad de Cazorla a la Corona, cuando las guerras carlistas, otorgando a su Ayuntamiento la categoría de Excelentísimo


historia


HISTORIA DE LA CATEDRAL DE JAÉN

Conquistada Jaén en 1246, el obispo de Córdoba D. Gutierre consagró la mezquita mayor, la dedicó a la Asunción de la Virgen, y la convirtió así en el primer templo de la diócesis. El edificio musulmán pervivió hasta 1368, cuando el obispo D. Nicolás de Biedma derribó la mezquita e inició la construcción de una catedral gótica, dotada de cinco naves y claustro. No debió ser una obra sólida, pues a finales del s. XV D. Luis Osorio tuvo que derribarla y empezó a construir otra, en el mismo estilo arquitectónico. Para ayudar a la construcción, el prelado otorgó una serie de indulgencias y gracias, y el sínodo de 1492 ordenó la colocación de un cepillo en cada parroquia con el fin de recolectar donativos destinados a sufragar los gastos del nuevo templo. En 1500 tomó posesión del obispado de Jaén uno de los prelados que ha pasado a su historia como mecenas de las artes e impulsor de distintas edificaciones: D. Alonso Suárez de la Fuente del Sauce, quien realizó importantes reformas en la fábrica de la catedral, aún en estilo gótico.